Preparación de las alcachofas:
Llena un recipiente con agua fría y añade perejil y unas gotas de limón (opcional). Esto evitará que las alcachofas se oxiden.
Retira las hojas exteriores duras de las alcachofas hasta que queden las hojas más tiernas. Corta los extremos de las alcachofas y córtalas por la mitad longitudinalmente.
Utiliza una cucharita para retirar el «heno» (pelos) de las alcachofas y luego colócalas en el recipiente con agua y perejil para evitar que se pongan marrones.
Preparación del relleno:
En un tazón mediano, mezcla el queso de cabra, el ajo picado, el perejil, la albahaca, el aceite de oliva, la sal y la pimienta. Mezcla bien hasta obtener una mezcla homogénea.
Relleno de las alcachofas:
Precalienta el horno a 180°C (350°F).
Una vez que las alcachofas estén preparadas, escúrrelas y sécalas con cuidado.
Con una cuchara, rellena el centro de cada mitad de alcachofa con la mezcla de queso de cabra y hierbas, presionando suavemente para que se adhiera.
Coloca las alcachofas rellenas en una bandeja para hornear y rocía un poco de aceite de oliva por encima.
Cubre la bandeja con papel de aluminio y hornea durante aproximadamente 25-30 minutos, o hasta que las alcachofas estén tiernas y el relleno esté dorado y burbujeante.
Retira las alcachofas del horno.
Puedes espolvorear un poco más de perejil fresco picado por encima, si lo deseas.
Sirve caliente y disfruta!
NOTA: Puedes tomar las alcachofas rellenas como plato principal acompañadas de una ensalada fresca o como un delicioso acompañamiento para carne o pescado.
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