Corta las pechugas en filetes finos. Añade sal y pimenta al gusto. Sobre cada pechuga coloca una loncha de jamón cocido ( elige un fiambre con alto porcentaje de carne), unas lascas de queso y una tiras de pimiento. Enrolla las pechugas con cuidado de que el relleno quede bien ajustado, puedes sujetarlo pinchándolo con un palillo. Coloca en una fuente de horno y riega con un chorrito de vino blanco (opcional) y aceite de oliva virgen extra. Hornea a 200 ºC hasta que estén un poco dorados.
Para la salsa: troceamos los puerros y la cebolla, añadimos agua sin llegar a cubrir, la leche ( o un trozo de queso bajo en grasa) y las especias. Dejamos hervir unos 20 minutos y trituramos. Servimos en una salsera con perejil picado para decorar.
Sirve todo caliente y disfruta!
NOTA: Podemos añadir una cama de patatas cortadas en rodajas finas, bajo los rollitos de pollo y hornearlo todo junto. Otra idea es cocinar estos rollitos rellenos al vapor. Salen riquísimos y jugosos.
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